Según O Globo, la mandataria convocaría a elecciones anticipadas en Brasil.
El juego político en la más alta cúpula de Brasil continúa: según el diario O Globo, la presidente Dilma Rousseff estaría dispuesta a renunciar a su cargo para evitar el juicio que a todas luces deberá enfrentar, tras la aprobación del proceso en la Cámara de Diputados y la más que probable aprobación en el Senado. Así, la mandataria convocaría a elecciones anticipadas, de acuerdo con lo que confirmó un senador del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) al periódico.
Luego de haber logrado la reelección a fines de 2014 por un margen escasísimo, Rouseff enviaría ahora una enmienda constitucional al Parlamento para adelantar la elección presidencial al 2 de octubre. La acción llegaría el viernes próximo, a una semana de la definición del Senado en torno al proceso de impeachment. Si hay luz verde el 11 de mayo próximo en la cámara alta, Rousseff se vería forzada a abandonar el puesto de presidente durante 180 días de todas maneras.
El diario brasileño agrega que Dilma y la mayoría de sus ministros apoyan la idea de anticipar la elección, pero todavía no está el consenso de los movimientos sociales.
Para el vicepresidente Michel Temer, sin embargo, adelantar las elecciones sería un golpe de Estado. De acuerdo con la publicación, en el entorno del impopular Temer -perteneciente al PMDB, partido con el que el PT llegó al poder en coalición y el que le retiró el poder algunos meses atrás-, Rousseff hará una cadena nacional para dar a conocer su intención y exigir que él haga lo mismo.
El plan buscaría evitar que el juicio se concrete y complique más la situación. Rousseff y sus ministros entienden que si se llama a elecciones, se instalaría un debate sobre la legitimidad de Temer, quien no contaría con el apoyo necesario de los votantes.
