Luego de casi ser superada por la ascendente Marina Silva, la actual presidenta recuperó la ventaja.
Dilma Rousseff alcanzó el 38% de las intenciones de voto de cara a las cercanas elecciones presidenciales de Brasil, y amplió su ventaja sobre su competidora Marina Silva, que bajó a 25%. En primera vuelta, los analistas sostienen que habría un empate técnico entre las dos, pero que en el balotaje la victoria de Rousseff sería clara.