El guardia de seguridad de un edificio en Olivos reprochó a un vecino por violar la cuarentena por coronavirus, y el hombre reaccionó con suma violencia

El presidente argentino, Alberto Fernández, vio el video y tomó cartas en el asunto.

A solo unas pocas manzanas de la residencia presidencial en la acomodada localidad de Olivos, un vecino del presidente violó la cuarentena violentamente. La escena quedó grabada por cámaras de seguridad y durante todo el domingo fue repetida por los canales de televisión, lo que sirvió para concienciar de la necesidad del autoconfinamiento preventivo.

Un preparador físico de 40 años que había regresado de EE.UU. la emprendió a puñetazos contra el guardia de seguridad del lujoso edificio donde vive cuando el vigilante le reprochó que no estuviera respetando la cuarentena, como le correspondía. Todo quedó registrado por la cámara instalada dentro de la garita del vigilante, donde entró por la fuerza.

Las imágenes fueron obtenidas y tuiteadas por un usuario de la red social y rápidamente se viralizaron durante la noche del sábado.

El presidente Alberto Fernández vio las imágenes y envió personalmente un mensaje privado a quien había subido el vídeo para asegurarse de que era auténtico y obtener más información. Al mismo tiempo, puso a trabajar al ministro del Interior, Wado de Pedro, hasta que dieron con el agresor, que para entonces ya había sido detenido por la Policía, mientras el guarda de seguridad había sido trasladado a un hospital.

La Fiscalía abrió una causa contra el violento preparador físico, que quedó confinado en su casa junto a su familia y con custodia policial, pues se consideró que llevarlo al calabozo ponía en riesgo de contraer el virus a los agentes de la comisaría.


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