El narco mexicano se había escapado por un túnel este viernes, pero fue perseguido y finalmente capturado.
Las autoridades mexicanas lo tenían muy cerca, pero muchas veces se les había escapado en cuestión de segundos: el capo narco Joaquín "Chapo" Guzmán había estado en el foco de la opinión pública azteca desde que se fugó de una cárcel de máxima seguridad en julio pasado. Finalmente, fue recapturado este 8 de enero. Pero antes, se les había escapado por entre los dedos una vez más.
El operativo incluyó decenos de hombres armados, quienes buscaron minuciosamente por una zona montañosa de México que Guzmán conocía a la perfección. El líder del Cártel de Sinaloa había estado oculto allí durante más de una década luego de su fuga anterior, en 2001. Cuando escuchó los pasos de sus perseguidores esta vez, el "Chapo" arrancó una bañera que lo conducía a un túnel, que se convertiría en su vía de escape favorita.
La construcción angosta estaba forrada con paneles de madera, contaba con aire acondicionado y su propio sistema de electricidad. Los túneles se conectaban las vías de drenaje de la ciudad, y así pudo escabullirse de las autoridades. Sin embargo, dejó detrás de sí un importante arsenal y una cantidad de mercancía muy grande. Con ella dormía. A través del túnel, Guzmán llegó a un motel en donde fue capturado.
En 2014, Guzmán fue capturado tras trece años de búsqueda. Pasó un año y cinco meses en una celda de máxima seguridad, la cárcel del Altiplano. En los escasos videos que de él había en ese lugar, se lo veía rendido a la suerte que se había conseguido con sus negocios. Sin embargo, en la noche del 11 de julio pasado, las imágenes de la cámara de seguridad lo mostraban nervioso, ansioso, hasta que va hacia la ducha: algo inusual, ya que según el reglamento de la prisión, solo podía hacerlo a las 6 de la mañana.
Resultó que por allí se entraba a un túnel que había requerido la remoción de casi tres toneladas de tierra. En el video se ve a Guzmán cambiarse sus zapatos por championes deportivos y volver a entrar vestido a la ducha; poco después desaparece de la pantalla con una toalla, que posiblemente haya servido para protegerle del polvo y de posibles gases subterráneos.
