La ONU igualmente advirtió que los esfuerzos mundiales para erradicar la enfermedad estaban estancados debido a la reducción de financiación.
El número de muertes relacionadas con el sida el año pasado fue de 770.000 personas.
Según la ONU, la cifra es un tercio menor que la 2010.
Sin embargo, advirtió que los esfuerzos mundiales para erradicar la enfermedad estaban estancados por la reducción de la financiación.
En su informe anual, Onusida afirmó que más del 60% de los casi 38 millones de seropositivos en el mundo reciben tratamientos antirretrovirales, una proporción récord.
Estos tratamientos, que permiten no transmitir el virus del sida si se toman correctamente, llegan a diez veces más de enfermos que a principios de siglo.
En general, la caída del número de muertes y el mejor acceso a los tratamientos se explican por los avances realizados en el sur y el este de África, el continente más afectado por el sida.
Pero en otras partes del mundo, algunos indicadores son preocupantes.
En Europa del Este y en el centro de Asia, el número de nuevas infecciones se disparó en 29% desde 2010.
Además, el número de fallecimientos a causa del sida aumentó 5% en estas regiones y 9% en Oriente Medio y en el norte de África, en estos últimos ocho años.
La organización destacó que "por primera vez desde el 2000, los recursos disponibles para la lucha global contra el sida bajaron".
En 2018 se dedicaron 19.000 millones de dólares a programas de lucha contra el sida, 1.000 millones menos que en 2017 y 7.000 menos que la suma que se considera necesaria para 2020.
