Un sacerdote español del Opus Dei y una funcionaria italiana son los acusados del asalto y la divulgación de documentos reservados sobre la reforma económica de la Santa Sede.
Dos importantes figuras de la limpieza que el Papa Francisco está desarrollando en el Vaticano fueron detenidas por presunta sustracción de documentos reservados este lunes por la gendarmería vaticana. Se trata del sacerdote español del Opus Dei Lucio Vallejo Balda, quien es secretario de la prefectura de asuntos económicos de la Santa Sede, y de Francesca Chaouqui, una italiana experta en comunicación y redes sociales.
Según una nota oficial del Vaticano, los documentos filtrados surgirán en libros que serán publicados en los próximos días. Se trata por tanto de un nuevo Vatileaks, la filtración masiva de correspondencia privada que desembocó en la renuncia de Benedicto XVI.
Monseñor Vallejo Balda ha sido secretario y miembro de la ya disuelta Comisión investigadora de los organismos económicos y administrativos de la Santa Sede, la misma comisión que integró Chaouqui. Francisco está intentando eliminar la opacidad que rodea a las finanzas de la Santa Sede.
El Opus Dei se desmarcó de las acciones de Vallejo, pero a nadie escapa que las resoluciones del reciente Sínodo de la Familia, que toma posturas más liberales por ejemplo respecto de los divorciados, no cayeron bien en el catolicismo más conservador.
