En una carta enviada a Mujica, Lula denuncia complot para promover juicio inconstitucional y arbitrario contra Rousseff

Acusa a partidos, empresarios y medios de comunicación de intentar revertir las conquistas sociales de la última década.

En la carta, Lula afirma que su país viva una situación gravísima a nivel institucional. Recuerda que en su Gobierno se logró sacar a Brasil del mapa del hambre en el mundo que elabora la ONU, librar de la miseria a más de 35 millones de personas y elevar la renta y el consumo de otros 40 millones.

Señala que pase a enfrentar un escenario económico internacional adverso, Dilma Rousseff mantuvo al país en el rumbo del desarrollo y consolidó los programas sociales.

Fue reelecta en el 2014 con 54 millones de votos, frente a una poderosa coalición de partidos, empresas y medios de comunicación, que comenzaron a conspirar para apoderarse del poder por medios ilegítimos, sostiene el expresidente brasileño. Crearon un clima artificial de callejón sin salida, aprobaron medidas para comprometer la estabilidad fiscal y desencadenaron un proceso de impeachment inconstitucional y arbitrario.

Dilma Rousseff es una mujer íntegra, escribe Lula en la carta a José Mujica. Nunca fue ni está siendo acusada de ningún acto de corrupción, agrega. La Constitución brasileña establece que sin crimen de responsabilidad no puede haber impeachment. Los procedimientos contables utilizados como pretexto para la destitución son idénticos a los adoptados por Gobiernos anteriores y por el propio vicepresidente Michel Temer.

Se trata, por tanto, resume Lula, de un proceso estrictamente político que viola abiertamente la Constitución.


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