Además, trascendió que el nuevo titular oficialista en la Cámara de Diputados es investigado por corrupción y participación en homicidio.
El juez Sergio Moro condenó a 23 años de prisión al exministro del Partido de los Trabajadores (PT) José Dirceu. Se trata de la antigua mano derecha del expresidente Lula Da Silva, que cayó en desgracia con el escándalo de corrupción conocido como "Mensalao", un sistema de compra de votos instalado en el Congreso durante la presidencia de aquel.
Este procesamiento tiene que ver con la causa de las coimas en la petrolera estatal Petrobras. El juez Moro consideró que Dirceu participó en el esquema de contratos sobrefacturados que una constructora firmó con la empresa, y que él personalmente recibió US$4.000.000 fruto de las coimas. Dirceu se defendió diciendo que recibió ese dinero por un trabajo de consultoría.
La denuncia contra el exministro partió de un lobbyista, el empresario Milton Pascowitch, que se acogió a la delación premiada: según este hombre, él habría actuado como intermediario entre la constructora y Dirceu, a quien habrían transferido recursos para el PT.
En la misma sentencia, el juez condena al extesorero del PT Joao Vaccari Neto a nueve años de cárcel, y al exdirector de servicios de Petrobras, Renato Duque, a diez.
Pero no fue el único caso que conmovió al mundo judicial brasileño en las últimas horas. El flamante titular del bloque oficialista en la Cámara de Diputados, elegido por el presidente interino Michel Temer, tiene tres acciones penales en su contra en la Corte Suprema por acusaciones de desvío de dinero público en la misma causa de Petrobras. Se trata del diputado André Moura, del Partido Social Cristiano, quien además es investigado por una presunta participación en intento de homicidio.
