El alto mando militar reiteró su lealtad al presidente venezolano y el alzamiento militar se diluyó.
El líder opositor venezolano Juan Guaidó, insistió el martes en su llamado a la Fuerza Armada a sublevarse contra el presidente Nicolás Maduro luego de una jornada marcada por un alzamiento militar que buscaba la salida del mandatario.
"Por eso mañana primero de mayo continuamos, continuamos en las calles, en los puntos de concentración que hemos determinado y definido en todo el territorio nacional. A lo largo y ancho de Venezuela, estaremos en las calles", dijo Juan Guaidó.
El alzamiento militar en apoyo al opositor Guaidó se diluía el martes al no lograr la expulsión de Maduro, a quien el general Vladimir Padrino López, el alto mando del Ejército reiteró lealtad.
Así un grupo de insurrectos pidió asilo en la embajada de Brasil en Caracas.
A lo largo del martes, Guaidó recorrió varios puntos de Caracas junto al también opositor Leopoldo López, tras ser liberado de su arresto domiciliario durante la rebelión militar. Por la noche López y su familia se resguardaron en la embajada de España en Venezuela, por decisión personal, tras haber permanecido parte del día en la sede diplomática chilena.
Antes, miles de opositores se concentraron en los alrededores de la base aérea de La Carlota, donde comenzaron disturbios que dejaron unos 69 heridos. Un grupo fue arrollado por un vehículo militar.
En tanto una multitud de chavistas cantaba "victoria popular" frente al palacio presidencial de Miraflores, mientras que manifestantes opositores intentaron acercarse a la sede del gobierno pero fueron repelidos con gases lacrimógenos y perdigones de goma.
Maduro proclamó por la noche la victoria sobre el alzamiento.
"Y con la verdad como espada, con la verdad como escudo, frente a tantos ataques y tantas mentiras, y es por eso que hemos salido victoriosos en todas las conyunturas y vamos a seguir saliendo victoriosos en todas conyunturas que nos toquen de aquí en adelante", expresó Nicolás Maduro.
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, dijo a CNN que Maduro planeaba huir a Cuba pero que Rusia lo convenció de quedarse.
Según el gobierno estadounidense, Padrino, el presidente la suprema corte, Maikel Moreno, y el jefe de la guardia presidencial, Iván Hernández, se habían comprometido a "apoyar el derrocamiento de Maduro".
El Grupo de Lima, integrado por 14 países de la región, expresó su apoyo a Guaidó, mientras que Cuba, Bolivia y Turquía condenaron el alzamiento militar.
Rusia y México llamaron a negociar, y la Unión Europea pidió "máxima moderación".
