Horacio Rodríguez Larreta nuevo jefe de gobierno de Buenos Aires

El representante del PRO obtuvo la victoria por un mínimo margen que no fue vaticinado por las encuestas y salpicó las ambiciones presidenciales del actual alcalde de la capital, Mauricio Macri.

La conservadora Propuesta Republicana (Pro) retuvo el gobierno de Buenos Aires en la segunda vuelta electoral celebrada hoy en la ciudad, aunque por un mínimo margen que los sondeos no vaticinaron y que salpica a las ambiciones presidencialistas del actual alcalde capitalino, Mauricio Macri.

Con el 99,99% de las mesas de votación contabilizado, el candidato de PRO, Horacio Rodríguez Larreta, considerado mano derecha de Macri, obtuvo el 51,64 % y gobernará la capital por los próximos cuatro años, pero su victoria lleva el sabor amargo de un primer puesto obtenido por un magro margen, apenas 3,3 puntos por encima de su rival.

Mientras Rodríguez Larreta mejoró en solo 6,9 puntos el resultado obtenido hace dos semanas en la primera vuelta electoral, su contrincante, Martín Lousteau, candidato del frente del centroizquierda Eco, obtuvo el 48,36 % de los votos, 23,4 puntos por encima de lo cosechado el 5 de julio.

Una sorpresa que los sondeos no vaticinaron: apenas hace dos días daban por sentado que el PRO ganaría por entre 10 y 21 puntos de ventajas por sobre Eco, un frente que, para las elecciones nacionales de este año, es aliado de la fuerza que lidera Macri.

"Festejamos el enorme orgullo de que los porteños sigan apoyándonos en esta transformación", dijo Rodríguez Larreta, quien reconoció la "excelente elección" se Lousteau ante los militantes del PRO reunidos en un centro de convenciones.

A ese mismo escenario subió minutos después el propio Macri para dar un discurso de campaña presidencial, en el que aseguró que la de hoy en la ciudad ha sido "una muestra de confianza" al "proyecto de cambio" del PRO "que hoy se extiende por toda la Argentina".

"Queremos una Argentina federal de verdad y para eso vamos a hacer un gobierno que trabaje con inteligencia para desarrollar este país", prometió el líder del PRO.

El mapa del escrutinio oficial en Buenos Aires es elocuente: Lousteau, quien fuera ministro de Economía durante el primer mandato de Cristina Fernández (2007-2011) y ahora enfrentado con el Ejecutivo, se impuso en nueve de los quince distritos en los que se divide la capital argentina.

"Nuestro agradecimiento para los militantes que hicieron una tarea gigantesca, hercúlea, con un esfuerzo enorme, peleando contra aparatos y una enorme cantidad de dinero. Estamos emocionados", dijo Lousteau ante sus seguidores, a quienes prometió ejercer una oposición "constructiva" en la ciudad.

El desempeño logrado por Eco demuestra que el joven exministro acaparó la mayor parte de los votos opositores al PRO vertidos en la primera vuelta, incluyendo los del Frente para la Victoria que lidera la presidenta argentina, Cristina Fernández, que resultó en tercera posición hace dos semanas.

El resultado impacta de lleno en el panorama electoral de cara a las primarias del próximo 9 de agosto, en las que quedarán definidos los candidatos que competirán en las presidenciales de octubre.

Macri, que tras gobernar por ocho años la capital aspira a dar el salto a la Casa Rosada, esperaba para este domingo una victoria contundente del PRO en su distrito electoral de origen, el cuatro mayor de Argentina, para posicionarse con un mejor perfil en la carrera presidencial.

Desde que se inició la seguidilla de comicios este año en Argentina, el PRO solo había celebrado una victoria, pero no cien por ciento propia sino compartida, con la Unión Cívica Radical, en las elecciones para gobernador en Mendoza (oeste).

En el resto de las citas electorales celebradas hasta ahora, los triunfos se dividen entre oficialismo y oposición.

El Frente para la Victoria ha ganado los comicios a gobernador en las norteñas provincias de Salta, La Rioja y Chaco y en la sureña Tierra del Fuego.

En tanto, en Neuquén (suroeste) se revalidó el poder del Movimiento Popular Neuquino, que gobierna la provincia desde hace medio siglo, mientras que en Río Negro (sur) logró la reelección un exaliado del kirchnerismo; en Santa Fe (centro) se impuso una coalición de centroizquierda en reñidos comicios, y en Córdoba (centro) venció el peronismo disidente.


PERFIL DE HORACIO RODRÍGUEZ LARRETA

rod_larr_1El economista Horacio Rodríguez Larreta, que inició su carrera en la gestión pública con el peronismo, se convirtió luego en mano derecha del conservador Mauricio Macri y le sucederá en el gobierno de Buenos Aires durante los próximos cuatro años.

Rodríguez Larreta, candidato al gobierno porteño por la conservadora Propuesta Republicana (Pro) que lidera Macri, se impuso hoy en la segunda vuelta electoral por solo tres puntos de ventaja frente al ex ministro Martín Lousteau, que encabezó una coalición de centro izquierda.

Con 49 años y porteño de nacimiento, Rodríguez Larreta es casi el sucesor "natural" de Macri: le acompañó en la creación de Pro, fue su jefe de campaña en las tres elecciones que disputó el empresario y es su jefe de Gabinete desde que se convirtió en alcalde de la capital argentina, en diciembre de 2007.

Afirma que le gustan los cargos "ejecutivos", nunca escondió sus ambiciones de convertirse en alcalde de la capital y cuenta que su vocación política despertó en la niñez.

Rodríguez Larreta se licenció en 1988 en Economía en la Universidad de Buenos Aires y luego hizo un posgrado en Harvard en Administración de empresas.

A su regreso de los Estados Unidos, en 1993, durante el Gobierno del peronista Carlos Menem (1988-1999) se estrenó en la gestión pública al sumarse a la Subsecretaría de Inversiones del Ministerio de Economía, a cargo de la atención global de los inversores extranjeros.

Dos años más tarde fue designado gerente general de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) y en 1998 se incorporó a la Secretaría de Desarrollo Social como subsecretario de Políticas Sociales.

En 2000, durante el Gobierno del radical Fernando de la Rúa (1999-2001), fue designado interventor del Programa de Atención Médica Integral (PAMI, servicio médico público para los jubilados) y un año después pasó a presidir el Instituto de Previsión Social de la provincia de Buenos Aires, durante la gestión del gobernador peronista Carlos Ruckauf.

A finales de 2001 fue nombrado director general de la Dirección General Impositiva (Fisco) de Argentina.

Tras el estallido de la severa crisis económica, política y social que sacudió a Argentina, Rodríguez Larreta se volcó en la política activa de la mano del entonces empresario y presidente del Boca Juniors Mauricio Macri, con quien en 2005 fundó Pro.

Fue jefe de campaña de Pro en 2005, cuando Macri obtuvo una banca como diputado nacional, en 2007, cuando el empresario fue electo jefe de Gobierno de Buenos Aires y cuando en 2011 logró la reelección.

Desde finales de 2007, Rodríguez Larreta se desempeña como jefe de Gabinete de Ministros de Buenos Aires, lo que le ha convertido en hombre fuerte de la gestión de Macri.

"Conozco la ciudad al detalle", se ufana quien conducirá la capital desde diciembre y que se reconoce "exigente" con sus colaboradores.

Sale a correr todos los días y en los fines de semana se lo suele ver en fiestas, pero detrás de bambalinas.

Su esposa es la reconocida "wedding planner" Bárbara Diez y el funcionario le acompaña a los eventos, pero se queda en la cocina y "cata" los manjares de los banquetes.

A Bárbara la conoció hace quince años, cuando le pidió que le tradujera un libro suyo al inglés. La entonces traductora rechazó el trabajo porque, sin vueltas, le dijo que el libro era "malísimo".

Pero de ese primer encuentro surgió una relación que terminó en boda.

Bárbara ya tenía una hija, Manuela, hoy de 18 años, y juntos tuvieron a Paloma, de 13 años, a la que se suma una bebé que viene en camino y se llamará Serena.

Afirma que siempre cultivó "el perfil de antihéroe", que no le presta atención a su imagen y que su única asesora es su mujer.

Fuera de la familia y de la política, su gran pasión es el fútbol. Es fanático del Racing, club del que su padre fue presidente.

"Lloré cuando Racing salió campeón, en 2001. Y siempre quise ser el 9 del equipo", confiesa.

Fuente: EFE.