El presidente serbio, Aleksandar Vucic, acusó el jueves "a unos manifestantes criminales" por los violentos enfrentamientos la noche del miércoles en Belgrado, en los que tres docenas de policías y manifestantes resultaron heridos."Prometí que protegeríamos la paz y la estabilidad, a pesar de los violentos ataques de manifestantes criminales", dijo el jefe de estado en […]
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, acusó el jueves "a unos manifestantes criminales" por los violentos enfrentamientos la noche del miércoles en Belgrado, en los que tres docenas de policías y manifestantes resultaron heridos.
"Prometí que protegeríamos la paz y la estabilidad, a pesar de los violentos ataques de manifestantes criminales", dijo el jefe de estado en el avión que lo llevó a París para reunirse con su homólogo francés Emmanuel Macron.
Fuentes médicas, citadas por el canal N1, informaron de 19 policías y 17 manifestantes heridos.
Los manifestantes se habían reunido frente al parlamento el miércoles para protestar contra la reintroducción de un toque de queda completo durante el fin de semana para luchar contra el resurgimiento de la pandemia viral.
Serbia tiene más de 17.000 casos de personas infectadas por covid-19 y 340 personas han muerto, según las cifras oficiales.
Después de las protestas del martes por la noche, el presidente había dado marcha atrás, diciendo que la decisión final sobre la cuestión correspondería a su gobierno, pero no pudo calmar los ánimos.
El miércoles, el movimiento ganó otras ciudades de Serbia, Novi Sad (norte), Nis (sur) y Kragujevac (centro), donde los locales del gobernante Partido Serbio del Progreso (SNS) de Vucic fueron vandalizados.
Los manifestantes acusan a las autoridades de haber favorecido una segunda ola de la epidemia levantando rápidamente el confinamiento para poder organizar las elecciones del 21 de junio ampliamente ganadas por el SNS.
