Los restos del expresidente de Perú serán velados en la sede su partido, el APRA, hasta el viernes.
A pesar de que le corresponden honores de Estado, estos no se rendirán dado que su familia se rehusó a que se llevaran a cabo.
Decenas de ciudadanos se aglomeraron en la jornada del miércoles a las puertas del hospital Casimiro Ulloa de Lima, donde los médicos intentaban salvarle la vida luego de que García se disparara en la cabeza, cuando la Policía llegó a su casa para arrestarlo.
El secretario de García, Ricardo Pinedo, relató que el expresidente tenía entre 4 y 5 armas en su casa, obsequios del comando conjunto de las Fuerzas Armadas, todas con licencia. Según la Policía, García se suicidó con una de esas armas.
En la casa del pueblo, como se conoce la sede del APRA, simpatizantes y representantes del partido recibieron el féretro con cánticos y consignas partidarias.
También a lo largo de los 10 kilómetros que separa el hospital del local partidario, centenares de peruanos saludaron el cortejo fúnebre. El presidente, Martín Vizcarra, decretó tres días de duelo, hasta el viernes inclusive.
