El tribunal constitucional español estableció que no puede llevarse a cabo el referéndum y despertó la indignación en las calles.
Decenas de miles de personas protestaron en Barcelona la decisión del tribunal constitucional español de suspender el referéndum para votar por la soberanía de Cataluña. La gente “no entiende por qué el Estado español está limitando nuestro derecho a voto”, comentó una asistente. Fue una manera de presionar al gobernador de la zona, Artur Mas, para que no se aparte de la línea independentista que ha seguido hasta ahora.
