Actualmente trabaja en un sistema que calienta el tabaco, evitando así, según dice, la liberación de la mayoría de las sustancias dañinas.
Según publica el diario español La Vanguardia, Philip Morris Internacional, líder de la industria tabacalera, abandonará el negocio de los cigarrillos para vender sólo productos libres de humo, entre los que se encuentran los IQOS (acrónimo de ‘I Quit Ordinary Smoking’).
La idea es sustituir gradualmente el tabaco tradicional por este nuevo sistema sin combustión.
El aparato consta de un cilindro con una resistencia eléctrica en su interior que genera un calor de 300 ºC y al que se le aplica una carga de tabaco que no se quema, sino que se calienta, liberando nicotina.
Philip Morris asegura que este sistema no libera otras sustancias altamente cancerígenas.
Según el científico español Ignacio González, que trabaja en la compañía tabacalera, “los análisis químicos indican que el aerosol de IQOS contiene, de media, entre 90 % y 95 % menos de componentes nocivos y potencialmente nocivos, en comparación con el humo del cigarrillo”.
Para todo esto la empresa ya destinó a 350 científicos para que trabajen en suiza con un presupuesto de 5.000 millones de dólares en diez años, tanto para la elaboración de los nuevos productos libre de humo, como para la investigación y reconversión de plantas dedicadas a la fabricación de cigarros tradicionales.
Ya el pasado 21 de marzo, la empresa informó que una fábrica en Grecia, cesó la producción de cigarrillos para únicamente producir Heets, que son las unidades de tabaco utilizadas con IQOS.
