Se necesitaban 20 presos interesados para instalarla. Al expresidente le negaron la posibilidad de salir a votar con una custodia.
Quien no pudo votar este domingo en las elecciones de Brasil fue el ex presidente Luiz Inácio Lula Da Silva, que está preso desde hace seis meses en Curitiba.
De acuerdo con las reglas electorales, los presos como Lula Da Silva, que no tienen una condena definitiva, pueden votar dentro del penal con la condición de reunir al menos otros 20 interesados en sufragar para entonces instalar una urna dentro de la prisión.
El Tribunal Electoral le negó el pedido esta semana porque en el centro de reclusión donde se encuentran él y otros presos de la operación Lava Jato, Lula era el único que quería votar.
Los abogados de Lula afirmaron que otros presos en la misma condición fueron autorizados a votar fuera de la cárcel bajo custodia policial y dijeron que recurrirán la decisión para la segunda vuelta.
A todo esto, este lunes Lula tuiteó: “En la segunda vuelta vamos juntos por el Brasil del diálogo y del respeto. La esperanza va a vencer al odio. Sea voluntario, regístrese. ¡Sea Lula!”.
Fernando Haddad, el sustituto de Lula por el PT, se medirá con Jair Bolsonaro en segunda vuelta a fin de mes.
