El comando israelí fue en busca de un líder de Hamas y lo mató.
Ocurrió el domingo a la noche. Un comandante de Hamas murió. Netanyahu regresó de urgencia desde París.
Una unidad especial del ejército israelí se internó en plena noche en territorio de Hamas: la Franja de Gaza. Los efectivos iban en un vehículo civil y ya habían avanzado unos tres kilómetros cuando encontraron a su presa: el comandante Nur Baraka de 37 años. Cómo lo mataron no está claro, pero lo que siguió después fue un tiroteo y un bombardeo de la fuerza aérea israelí para proteger a sus hombres, en un caos que terminó con siete palestinos y un militar judío muertos.
Este lunes, los funerales de los palestinos muertos fueron masivos. Los cuerpos de los milicianos, seis de ellos de las Brigadas Ezzedin al Qassam, brazo armado del movimiento islamista Hamas, y otro de las Brigadas Salahidin, ala militar de los Comités de Resistencia Popular, fueron cargados por milicianos armados y enmascarados desde el hospital de la localidad sureña de Jan Yunis hasta sus hogares, y trasladados a la mezquita para ser enterrados.
El tiroteo, ocurrido cerca de la localidad de Jan Junis, también dejó un soldado israelí herido, según confirmaron las autoridades israelíes este lunes. Benjamin Netanyahu, el primer ministro de Israel, que se encontraba de visita en Francia, adelantó su regresó al país.
Desde la Franja, se informó que los muertos son siete miembros de Hamas, entre ellos un comandante (Baraka), y que otros siete resultaron heridos.
El incidente vuelve a desatar el temor a una escalada entre Israel y Hamas.
Tras el incidente los palestinos dispararon 17 cohetes contra Israel, tres de los cuales fueron interceptados por el sistema antiaéreo Cúpula de Hierro, informó el Ejército. En las ciudades fronterizas sonaron las alarmas por bombardeos.
