Jacinda Ardern expresó respaldo y contención para la comunidad musulmana atacada en dos mezquitas este viernes.
La primera ministra neozelandesa, Jacinda Ardern, expresó lo siguiente tras el ataque a dos mezquitas en la ciudad de Christchurch:
Las víctimas podrían ser migrantes de Nueva Zelanda, o incluso refugiados. Han escogido hacer de Nueva Zelanda su casa y lo es. Ellos somos nosotros. Lo voy a describir como un acto de violencia sin precedentes. Un acto que no tiene lugar en Nueva Zelanda. No somos así.
Gobernantes de varios puntos del mundo se pronunciaron. Desde Estados Unidos, el secretario Mike Pompeo dijo que condenan el odioso ataque y que sus pensamientos y oraciones de los estadounidenses están con las víctimas de los atentados y sus familias. El secretario de Exteriores dijo que el Gobierno está listo para prestar la ayuda que Nueva Zelanda necesite.
Por su parte, el presidente francés Emmanuel Macron denunció el crimen odioso y dijo que Francia se levanta contra toda forma de extremismo.
Este viernes hubo manifestaciones en países musulmanes como Turquía ante la mezquita de Fatih en Estambul, al igual que en Dacca, en Bangladesh.
