Se consideró que hubo irregularidades en la formación de la comisión que investigaría a la presidenta.
El Supremo Tribunal de Brasil emitió una medida cautelar por la que suspende la comisión especial que debía analizar el proceso de destitución de la presidenta Dilma Rousseff, por supuestas irregularidades en su creación, que tuvo lugar unas horas antes en una sesión agitada del Congreso.
La decisión del presidente de la Cámara de Diputados Eduardo Cunha, archienemigo político de Rousseff, de recurrir al voto secreto para elegir a los miembros de la comisión, lo que desató tumultos y peleas entre los legisladores, fundamentó la queja del Partido Comunista, aliado del gobierno, que alegó diferentes irregularidades.
El planteo fue considerado relevante por el Tribunal Supremo, y la medida cautelar pone el proceso de juicio político en pausa hasta el 16 de diciembre, cuando el tribunal se reunirá en pleno para analizar la validez de los pasos tomados hasta ahora. En su decisión, la corte solicita en un plazo de 24 horas a Cunha que aporte más información sobre la polémica formación de la comisión.
