El número de incendios, tal como sucedió en 2019, está aumentando.
Los incendios ilegales provocados por agricultores se extendían el domingo por la selva amazónica en el estado brasileño de Pará.
"Hacía mucho viento y el fuego pasó el cortafuegos y quemó un poco más de lo que realmente tiene que arder. Pero creo que ya está bajo control. El fuego ya está bajo control ahora", dijo el agricultor Miguel Da Silva.
El llamado cortafuegos es una forma de preparar el terreno para las plantaciones, pero muchas veces las llamas se salen de control y terminan traspasando los límites de las propiedades privadas.
El presidente Jair Bolsonaro ha sido criticado por líderes internacionales luego del aumento de la deforestación de la selva amazónica bajo su gobierno.
Esta semana el mandatario aseguró que es mentira que haya incendios en la Amazonía por tratarse "bosque húmedo".
Pero según datos oficiales, la deforestación en la Amazonía brasileña se mantuvo este año en un nivel similar al récord establecido en 2019.
Expertos aún prevén una nueva temporada de incendios preocupante, a un año de los históricos incendios que causaron alarma internacional.
Según observaciones satelitales del sistema DETER, del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales, el área deforestada en el bosque tropical más grande del planeta fue de 4.731 km² entre enero y el 31 de julio.
La cifra es ligeramente superior a la registrada en el mismo período de 2019.
