A los 98 años falleció la referente de la búsqueda de desaparecidos Luisa Cuesta; murió sin saber el paradero de su hijo

Su hijo Nibio Melo Cuesta está desaparecido desde 1976, cuando fue detenido en Buenos Aires.

Este miércoles a los 98 años murió Luisa Cuesta, según confirmaron a Telemundo integrantes de la Organización de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos.

Murió a los 98 años pero nunca bajó los brazos en su búsqueda de los detenidos desaparecidos. Pese a su aspecto frágil sus declaraciones no hacían concesiones.

Nebio Melo era su único hijo. Militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria y del Partido Comunista Revolucionario fue detenido en Argentina en 1976.

“Por los restos de mi hijo ya no voy a llorar, ya he llorado demasiado. Llevo 30 años llorando por la falta de él y no voy a llorar por no encontrar los restos. Pero quisiera que se encontraran más restos para que la sociedad se sanara de todo el mal que recibió y que nunca más se repita esto”, dijo.

La importancia de aprender de la historia para no volver a repetirla era un concepto que expresaba cada vez que le era posible. “Que la sepan bien para defenderse frente a nuevos transgresores militares que quieran nuevas dictaduras para imponerse, matar gente, para luego decir que no saben nada y callarse la boca”, estableció.

Luisa Cuesta vivió en Argentina y se exilió en Holanda. En 1985 volvió a Uruguay.  Formó parte de la Comisión para la Paz creada por Jorge Batlle para avanzar en las investigaciones sobre el destino de los detenidos desaparecidos.

“Aunque no siga el camino que nosotros siempre aspiramos creemos que nosotros valoramos que es la primera vez que se busca un camino. Lo hemos intentando durante 25 años y no hemos encontrado nunca una brecha”, sentenció en aquella oportunidad.

En 2012 la nombraron ciudadana ilustre. También recibió un doctorado Honoris Causa en 2013. En 2015 un quebranto de salud le impidió estar con la foto de su hijo en la marcha por el silencio que desde 1996 se realiza en el aniversario del asesinato de Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruiz, Rosario Barredo y William Whitelaw. Dos años después el Centro Cívico de Casavalle se inauguró con su nombre.

Su abogado, el Dr. José Luis González, destacó la constancia de Cuesta en su lucha:


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