A partir esta jornada, 22 equipos del prestador estatal recorrerán los centros del área metropolitana y de Rivera. El resto están a cargo de la Dirección Nacional de Sanidad Policial.
La Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) comenzó este lunes los controles médicos en centros penitenciarios de la zona metropolitana y Rivera. El módulo 11 de la cárcel de Santiago Vázquez, ex-Comcar, fue la primera parada de esta iniciativa, que según anunció el presidente del prestador estatal, Leonardo Cipriani, cubrirá la atención de 9.500 reclusos.
A mediados de setiembre, en la unidad de Santiago Vázquez se descubrió el caso de un recluso que fue secuestrado, torturado y abusado sexualmente por sus compañeros de celda durante aproximadamente 60 días. El caso está siendo investigado por la Fiscalía.
El ministro del Interior, Luis Alberto Heber, dijo en rueda de prensa que esta iniciativa marcará "un antes y un después, de modo tal que no nos agarren sorpresas". El jerarca agregó que "esta prevención es lo básico" que hay que tener en todos los penales del país.
Los controles de ASSE serán un chequeo general del estado de salud de los presos a partir de 22 equipos médicos, informó Cipriani el viernes pasado, tras visitar la cárcel de Santiago Vázquez. "Lo importante es actuar rápido, porque nosotros no podemos estas cosas dejarlas en los discursos. Hay que llevarlas a la cancha rápidamente, que es lo que estamos haciendo ahora", dijo en rueda de prensa.
La atención de salud de los presos estuvo en discusión la semana pasada, al igual que las condiciones de trabajo de los médicos y el personal de salud que atienden en las cárceles. Un recluso del Penal de Libertad intentó ahorcar a una médica, que fue liberada. El hombre, recluido por homicidio, asesinó el año pasado a dos prisioneros del ex-Comcar para conseguir medicación, informó el director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, Santiago González.
