Pidieron también el cierre del Congreso.
Manifestaciones en plena pandemia de coronavirus.
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, asistió el domingo a una concentración de unas 600 personas que rompieron la cuarentena y se reunieron frente al Cuartel General del Ejército en Brasilia para pedir una intervención militar y el cierre del Congreso.
Bolsonaro critica constantemente a los líderes del Congreso, a los gobernadores y alcaldes que defienden las medidas de cuarentena y distanciamiento social para contener la propagación de covid-19.
En Brasil, la enfermedad ya deja más de 2.400 muertes y casi 40.000 contagios.
El mandatario demerita la letalidad del virus, al que ha calificado de "gripecita", promueve aglomeraciones y se pronuncia reiteradamente a favor de la apertura del comercio y las escuelas.