Tras pasar un mes en Venezuela, el exrecluso de Guantánamo volvió a Montevideo.
El exrecluso de Guantánamo Jihad Diyab volvió a Uruguay desde Venezuela durante la madrugada del martes; pasó casi un mes en ese país.
El hombre de 43 años, tras llegar a la base aérea, fue trasladado al Hospital Maciel para hacerle un control médico y físico. Los exámenes dieron normales, por lo que le dieron el alta y fue llevado hasta su apartamento del Centro de Montevideo.
La exvice canciller Belela Herrera mantuvo una breve conversación con Diyab, en la que el ciudadano sirio dijo que quiere irse de Uruguay. En este sentido, la exjerarca dijo que Diyab no dice ni hace eso de desagradecido, sino que no ha podido acostumbrarse a las costumbres uruguayas, como sí lo lograron los otros cinco exreclusos que llegaron a Uruguay.
Tampoco quiere lo que el Gobierno uruguayo le ha ofrecido de traer a su familia: su esposa, su madre y sus tres hijos. Según Herrera, hay un compromiso de Nin Novoa de enviar a Qatar a Diyab para que pueda encontrarse con su familia.
En este sentido, Herrera afirmó a Telemundo:
“Su mujer es una mujer maravillosa. Es paciente, tuvo el amor de estar todas las noches con él a través de Skype conteniéndolo. Ella quería venir, pero fue viendo que las cosas se pusieron complicadas… Él quería tener una cosa agradable para ella. Es normal. Es un tipo que tiene un hijo que lo mataron en la guerra, una esposa que estuvo presa, es esa parte humana la que tenemos que reconocer. No es que no esté agradecido con nuestro país, pero no lo ve como u futuro para él. Él quiere irse a cualquier país árabe. Vamos a hacer todos los esfuerzos para que se vaya a Qatar. El ministro se comprometió a hacerlo, creo que esa sería una gran solución”.
En declaraciones a Radio Monte Carlo, el canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, dijo que traer a la familia de Diyab era lo que estaba previsto antes de que él se fuera a Venezuela:
“Se estaban haciendo las gestiones para traerla y él pidió que se suspendiera. Hablamos con él para ver en qué situación está de recibir a su familia. Teníamos un protocolo establecido con la familia. Parte del programa de los refugiados es la reinserción, pero no sé, como él pidió que eso se suspendiera…”.
