La aeronave estuvo fuera del país y luego se le debió realizar mantenimiento.
El único vuelo sanitario que se realizó con la aeronave presidencial fue el 3 de marzo, dos días después de que autoridades de Salud, Defensa y la Fuerza Aérea lo presentaran. Luego de esa fecha hubo seis traslados, todos realizados en otros aviones, informó El Observador.
El primer vuelo sanitario trasladó de Rivera a Montevideo a un paciente oncológico. Duró 46 minutos. Y desde que aterrizó el avión en el aeropuerto hasta que el paciente logró irse en la ambulancia pasaron 25. Más de la mitad de lo que demoró el vuelo entre Rivera y Montevideo.
Precisaron siete personas –entre médicos y de la fuerza aérea- para lograr bajar al paciente en la camilla y luego subirlo a la ambulancia, en un proceso que duró varios minutos. Esto se debe a que el avión que se utiliza para el transporte sanitario no fue construido con ese fin, por lo que precisó una adaptación para ingresar la camilla.
En los traslados del 7, 8, 11, 15, 19 y 20 de marzo se utilizaron otras aeronaves de la Fuerza Aérea. En esos casos fueron a personas con quemaduras, receptores de órganos, un bebé prematuro o un paciente con una fractura. Según informó el vocero de la Fuerza Aérea se debió a que estaba en misiones fuera del país y la semana pasada en mantenimiento.
La compra de la aeronave fue cuestionada desde un inicio. El Tribunal de Cuentas observó su compra y también fue criticada por expertos médicos que consideran que si era necesario un avión sanitario se debía haber comprado uno destinado con ese fin.
En casi un mes, el avión presidencial fue utilizado una sola vez para un vuelo sanitario y todavía no trasladó al presidente.
