Advierten que esa iniciativa esconde políticas de shock y una de las medidas que más rechazo genera es la de importar combustible en lugar de petróleo para que lo refine Ancap.
El prosecretario de Presidencia, Juan Andrés Roballo, dijo que Lacalle cambió el nombre a las políticas de shock a la ley de urgente consideración, que pretende sancionar al asumir la Presidencia.
Óscar Andrade consideró que la importación de combustible “da pánico”. Carolina Cosse calificó esa medida como “un disparate” que va tras las empresas públicas, porque se demostró que se genera valor al refinar combustible y que importarlo saldría más caro.
“Para lograr precios relativamente similares o mejores que los que logra Ancap, tendría que importar volúmenes similares. ¿Dónde los va a guardar?”, dijo Cosse.
