Se busca equiparar los criterios para eliminar las ventajas que tienen los comercios que se han instalado del lado de Brasil.
Cuando Brasil habilitó la instalación de free shops lo hizo con condiciones más favorables que las que tienen los que están en Uruguay.
Por eso se está negociando un nuevo protocolo.
Por ejemplo, Uruguay amplió a 300 dólares la franquicia impositiva para productos que ingresen uruguayos desde Brasil y espera que ese país adopte la misma medida.
Además, se amplió la lista de productos que los free shops uruguayos pueden vender.
El protocolo actualizará la lista de productos. Además, se quiere unificar criterios: mientras en Uruguay se vende sólo mercadería incluida en la lista, en Brasil se puede vender todo menos lo que está en la lista lo que le da ventaja sobre la cantidad y variedad de productos.
Uruguay también modificará el canon que pagan los free shops, que hasta ahora se cobra cuando la mercadería salía del depósito fiscal hacia el comercio.
Con todas esas diferencias, sumada al hecho de que en Brasil los free shops pueden venderle a brasileros y en Uruguay no pueden venderle a uruguayos, es fundamental aprobar ese protocolo.
La próxima reunión de ambos países será en octubre.
