El protocolo de reintegro está basado en el que elaboró la ANEP para la educación pública y cada institución generará uno propio en función de sus particularidades
Los alumnos de inicial y bachillerato de colegios privados volverán a las aulas el martes 16, ya que el 15 es el día de la educación privada. Los alumnos de primaria y ciclo básico retornarán a clases el lunes 29 de junio. El protocolo sanitario está basado en el que ya se aplica en la educación pública en cuanto a cuestionario a los niños, uso de implementos de seguridad personal, distancia física e higiene. Sin embargo, las características de cada institución privada respecto de su espacio físico, instalaciones, personal y alumnado obligan a que cada una adapte el protocolo a sus necesidades.
Cada colegio definirá si tendrá clases durante toda la semana o dejará algún día libre y cuántas horas durará cada jornada, que en ningún caso puede superar las cuatro horas, según establecieron las autoridades nacionales. A diferencia de muchas escuelas públicas, las privadas pueden disponer de personal que asegure la desinfección de los edificios durante la misma jornada, sin necesidad de cerrarlos.
En los días previos a la reapertura, cada institución debe capacitar a su personal con profesionales del área médica sobre coronavirus y las medidas de prevención. También están informando a las familias sobre los protocolos y relevan la situación de cada funcionario para saber quiénes integran la población de riesgo.
Otro tema a definir por cada institución es la complementariedad entre actividad presencial y virtual, debido a que la concurrencia de los alumnos no es obligatoria y queda a criterio de cada familia. Los colegios deben asegurar también el acceso a los alumnos que no concurran, y este es un punto de preocupación para los trabajadores, que reclaman que esta responsabilidad no recaiga únicamente en el docente del curso, que puede llegar a ver aumentada la carga horaria y la exigencia para responder a todos los requerimientos.
En el protocolo firmado entre el Sindicato de trabajadores de la educación privada y las asociaciones de instituciones privadas, tanto católicas como laicas, incluye un apartado sobre prevención de la discriminación y estigmatización, ante la preocupación de que un paciente con coronavirus pueda ser víctima de bullying o acoso por parte de sus pares.
