El recuerdo de Óscar Urtazún sobre Luisa Cuesta: "Tenía un corazón de oro, era un ejemplo. Era porfiada, dura y tierna"

Muy emocionado, el miembro de Familiares contó cómo era su vínculo con Cuesta y reivindicó su lucha.

Óscar Urtazún y Luisa Cuesta fueron compañeros en la lucha por la búsqueda de desaparecidos durante la dictadura militar a través de la asociación Madres y Familiares de Detenidos Desparecidos. Urtazún, que considera a Cuesta como su "segunda madre", habló tras el fallecimiento de la mujer que fue referente de esta causa: "Era una de las tantas luchadoras que tuvimos dentro del movimiento de Familiares buscando a sus hijos, pero era inquebrantable, era impresionante. Tan chiquita como firme, como dura, era puro corazón", dijo.

Sobre su vínculo personal, dijo: "Era mi segunda madre y nos peleábamos. Porque yo soy vasco y ella era más vasca que yo, pero terminábamos abrazándonos siempre". También relató una anécdota: "Viajamos juntos, por ejemplo fuimos a Chile. Ahí recibimos una andanada de gases lacrimógenos  en una manifestación y ella no se movió porque pensó que era una ambulancia".

"Por más que el hijo era político, ella era una ama de casa, una trabajadora, una luchadora por la vida. Cuando se mete en el ambiente que la búsqueda por más que nosotros realzamos la parte de la moral, del compromiso, sabemos que estábamos en un mar político, que estábamos contaminados constantemente desde todos los ángulos. Ella no entendía todo ese entramado. A veces nos pedía alguna línea de entendimiento de lo que se estaba trabajando, porque estábamos rodeados de política", contó Urtazún.

¿Por qué resaltó dentro del movimiento?  Porfiada, dura y tierna.

 


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