Un repaso por estos trágicos hechos.
En setiembre de 1957 el hincha de Sudamérica Carlos Gómez, un taxista de 33 años, murió golpeado por hinchas de Progreso cuando ambos equipos disputaban el ascenso.
A este primer registro de muerte violenta en una cancha se sumó, apenas dos años después, un hincha asesinado de un balazo al finalizar un partido entre Liverpool y Danubio.
En el año 1963 un hincha de Wanderers murió al caer al talud del Centenario tras un incidente en la Amsterdam con hinchas de Nacional.
La década del 90 fue la más violenta en las canchas. En 1992 el exfutbolista Wellington Castro murió tras ser atropellado por un caballo de la Republicana cuando se enfrentaban parciales de Basáñez y Villa Teresa.
En 1994 un adolescente, hincha de Nacional, fue degollado cuando se dirigía hacia el Estadio en la Previa de un clásico.
Al año siguiente, durante la Copa América, un joven argentino murió en Paysandú tras un enfrentamiento con hinchas chilenos.
En 1996, el hincha de Nacional Daniel Tosquellas murió tras recibir un balazo en el pecho cuando quiso evitar que hinchas de Cerro le robaran la bandera a un niño, en las afueras del Parque Central. Un adolescente confesó ese crimen aunque familiares de la víctima creen que quien disparó fue otra persona.
Pasaron diez años, hasta que en el 2006 un hincha de Nacional murió días después de haber sido golpeado por hinchas de Peñarol en un clásico que se jugó en Maldonado.
Ese mismo año el hincha de Cerro, Héctor da Cunha, fue apuñalado cinco veces cuando esperaba el ómnibus con su hijo cerca del Clínicas, a la salida del Centenario. Tres barras de Peñarol fueron procesados como coautores del homicidio.
En el 2010 un hincha de Villa Teresa murió al recibir dos balazos en La Paz, en un partido de la 2ª División Amateur.
Lejos de los estadios pero directamente vinculado al fútbol, está el último antecedente. Hinchas de Peñarol que festejaban el aniversario del club el 28 de setiembre del 2016, fueron atacados a balazos por hinchas de Nacional.
Tres jóvenes resultaron heridos y uno de ellos falleció: Hernán Fiorito. La justicia identificó a 16 personas por el homicidio.
