Las fuentes de generación hidráulica le ceden cada vez más espacio a la energía eólica.
El consumo de electricidad aumentó un 3,6 % en los primeros seis meses del año frente al mismo período de 2017, según un informe de la consultora SEG ingeniería publicado por El Observador.
Con este dato, es probable que al final del año también se registre un incremento, quedando atrás la caída de 3,2 % de 2017, la primera tras 13 años de crecimiento consecutivo.
Según la consultora, respondería a temperaturas más cálidas, un mayor uso de tecnología led en iluminación, el crecimiento de la generación fotovoltaica y las políticas para promover el ahorro energético.
Sobre las fuentes de abastecimiento, las energías renovables ganan terreno, pese que las represas hidráulicas siguen siendo el principal proveedor.
La generación eólica representa el 40 % de lo producido por todo el sistema tras crecer un 30 % en el último año.
Mientras, la energía que generan las centrales térmicas aumentó un 120 % frente a 2017, pero apenas explica un 4 % del abastecimiento de la demanda en enero-junio.
