A pesar del incidente y de las diferencias que se notaron, el congreso logró la aprobación de una declaración final.
Este domingo se realizó el congreso del Partido Socialista y se generaron tensiones que provocaron incluso insultos y empujones entre dirigentes. La reunión tuvo lugar en el Centro Gallego, en Carrasco, para debatir la postura política del partido, dividido en al menos dos corrientes.
Pese a las diferencias, el congreso aprobó una declaración final y tres documentos casi por unanimidad.
Según publicó este lunes la diaria, el malestar entre dirigentes comenzó cuando varios delegados del interior se retiraron porque el congreso no aprobó un documento que habían propuesto; pero además hubo otras declaraciones de distintas secretarías del partido que tampoco tuvieron el respaldo del congreso, y la tensión iba en aumento.
Los incidentes que se dieron afuera de acuerdo con la diaria fueron disueltos rápidamente mientras dentro del Centro Gallego seguía sesionando el congreso.
