Incendio en La Floresta: el testimonio de la vecina cuya casa se "destruyó" por las llamas y la emoción por los 200 vecinos que la auxiliaron

"La solidaridad uruguaya no tiene límites. Vino gente de no sé donde: niños, gurises, adultos, ancianos. Hicieron una cadena humana, una cosa maravillosa. Todavía no me puse a llorar, pero cuando me ponga a llorar voy a llorar tres días seguidos", dijo Mónica Landen.

Los bomberos continúan trabajando este viernes en la tarde en dos incendios en la zona del balneario La Floresta (Canelones). En total, los dos focos ya devoraron 310 hectáreas de campo, un aserradero y una casa.

Telemundo dialogó este viernes con Mónica Landen, dueña de la casa incendiada ubicada en calle Los Aromos y Avenida Sarandí. "El fuego empezó ayer (jueves) a las 16:00. El origen del fuego es desconocido, pero vino de atrás del vivero a 20 metros de acá. Empezó en la casa colindante de la casa de atrás y acá se prendió el quincho (techo de paja) y luego la casa. Saqué a los gurises, al auto y llamé a los bomberos", comenzó.

La vecina cuestionó que los efectivos "tardaron bastante en llegar", pero calificó su trabajo de "maravilloso". "Hicieron todo lo que pudieron. Trabajan a pulmón, con mucha buena voluntad y poca pericia porque no tienen elementos y muy poco apoyo", dijo.

Landen se detuvo a agradecer a los vecinos que se autoconvocaron para ayudarla: "Vinieron vecinos de todos lados. Había 200 personas dentro de la casa con tachos, bidones, baldes de agua".

"Los vecinos son unos soles. La solidaridad uruguaya no tiene límites. Vino gente de no sé dónde: niños, gurises, adultos, ancianos. Hicieron una cadena humana, una cosa maravillosa. Todavía no me puse a llorar, pero cuando me ponga a llorar voy a llorar tres días seguidos. Voy a tratar de usar las redes y los diarios locales para hacer llegar el agradecimiento", relató.

Consultada sobre el impacto del fuego en la vivienda, contó que quedó "destruida". "La planta alta totalmente y la parte de abajo no sé porque tiene una parte de losa. La barbacoa está destruida también. Lo bueno es que es todo material, no se lastimó nadie", manifestó.

Pese al esfuerzo de Bomberos, el fuego continúa en el hogar. "Me dijeron que la única forma que se podía extinguir era tirando abajo el quincho. Les di autorización y lo hicieron. Pero todavía no lo han podido dominar", lamentó.


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