Interior detalló cómo funcionará el plan para combatir los homicidios con exreclusos y en qué países ha tenido "mucho éxito"

“La primera vez que se aplicó este programa fue en Chicago (Estados Unidos) en 2009 y los homícidios bajaron un 40%", aseguró Diego Sanjurjo.

"Una de las políticas de seguridad con más evidencia a favor en el mundo". Con esa expectativa y con los fondos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) el Ministerio del Interior impulsará un nuevo plan para combatir los homicidios, luego de que el año 2022 terminara con un 25% más de asesinatos que el 2021. 

La particularidad del plan, que fue anunciado en líneas generales por el ministro Luis Alberto Heber en Desayunos Informales este miércoles, es la contratación de “exreclusos, gente que ha cumplido con su pena, que ha sido reeducada, que ha sido reintegrada a la sociedad”.

Para conocer en detalle el plan, Telemundo dialogó con Diego Sanjurjo, Coordinador de Estrategias Focalizadas en Prevención Policial del Delito del ministerio y coordinador de la mesa interpartidaria donde el proyecto será debatido y diagramado.

"Serán personas que ya pasaron por ese camino de delincuencia, que crecieron en barrios conflictivos y que luego por pasar por el sistema de justicia o por otra razón cambiaron radicalmente de vida y llevan 10 o 20 años trabajando en ONGs o iglesias. El fin es evitar que jóvenes pasen por los mismos errores por los que pasaron ellos y tomando lo que ellos vivieron, evitar  que otras personas sufran", comenzó Sanjurjo.

Estos exreclusos serán capacitados en mediación y gestión de conflictos y se les pedirá que "vuelvan a los territorios que conocen bien y que cuando alguien precise ayuda puedan solucionar el conflicto".

"Por ejemplo, puede pasar que una persona te llama y te dice: 'tengo un hermano que le debe dinero a otra persona, lo están amenazando de muerte y ya le cortaron un dedo. No quiere denunciar -nunca nadie denuncia-. A ver si me podés ayudar'. A lo mejor esta persona puede ir y conversarlo (con el agresor) y llegar a una alternativa, ganar tiempo o explicarle las consecuencias de un homicidio", relató.

¿Una persona que está dispuesta a cortarle un dedo a otro y a asesinarlo respondería positivamente a una conversación? El técnico respondió con cifras: “La primera vez que se aplicó este programa fue en Chicago (Estados Unidos) en 2009 y los homicidios bajaron un 40%. Luego se llevó a Baltimore y bajó 70%. Se generalizó en ciudades peligrosas de Estados Unidos. Luego dio el salto a América Latina: Trinidad y Tobago, Honduras, en ciudades mucho más peligrosas que Montevideo y ha habido mejoras de 30, 40 y 70%".

En ese sentido, Sanjurjo aseguró que la medida "hace décadas que viene demostrando mucho éxito a nivel mundial, en una cantidad de países de América Latina, África y Europa".

Sobre el proceso para su implementación, indicó que un máximo de US$ 2 millones del préstamo de US$ 10 millones del BID irán destinados a la iniciativa. Los pormenores del plan se acordarán en la mesa de trabajo interpartidaria que lidera el propio Sanjurjo. Buscarán un "consenso" para que sea una "política de estado".

Apuntan a tener diseñado el proyecto en mayo y aplicarlo "cuanto antes".


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