El líder de Alianza Nacional habló en el congreso de la lista 66 del Partido Nacional, dijo que "el país no soporta un cuarto Gobierno del FA" y volvió a mostrar las firmas recaudadas para combatir la delincuencia.
Jorge Larrañaga volvió a referirse a la junta de firmas que lleva adelante para modificar aspectos de la Constitución, en la lucha contra la delincuencia:
Estoy muy contento porque obtuvimos diez mil firmas más, es mucha gente y es la sagrada expresión de la gente poniendo su nombre, su credencial y su firma. Ese es un compromiso muy fuerte. Yo les confieso que llego de noche a mi casa, tiro los huesos en la catrera, miro al techo y digo: estoy cansado.
Por eso también tuvimos la convicción de salir a juntar firmas, saber que es una tarea compleja y difícil plasmar en un papel los datos del ciudadano y su firma. Sabiendo que es una tarea que requiere una enorme militancia pero no nos equivocamos porque las firmas están, la gente quiere firmar, hay que ir a buscar las firmas. A mí me parece central y prioritario en tiempos en donde la política y los políticos estamos desvalorizados, recurrir a la gente, recurrir al pensamiento y a la opinión de la gente.
Cinco años más de gobierno del FA gastando lo que no se tiene y metiéndole más impuestos a los ciudadanos. El país no soporta un cuarto gobierno del FA. Uruguay no puede soportar más que siga ganando la delincuencia las calles. Para eso nosotros tenemos firmas para reformar la Constitución y presentamos instrumentos que permitan combatir la delincuencia. Esto no es mágico pero es un cambio en la línea de cómo combatir la delincuencia.
Además, el líder de Alianza Nacional criticó al Gobierno del FA:
Recién daba cifras del equipo económico Pablo (Abdala) y es así. El endeudamiento del país pasó de quince mil millones de dólares en 2005 a 40 mil millones dedólares a marzo de este año. Nuestro endeudamiento creció 25 mil millones de dólares. Por supuesto nos van a decir que el país creció y precisamente porque creció es que hoy tenemos derecho a reclamarles que no tuvieron resultados las políticas sociales, ni de seguridad, ni educativas.
Y que han administrado muy mal. Rompieron los sueños de miles de uruguayos desencantados, de gente que depositó la confianza en su fuerza política, defraudaron esa confianza. Forma parte de una legión hoy de miles de compatriotas que no saben cuál va a ser su decisión en la próxima instancia electoral.
Porque el FA creyó que eran intachables, que eran los dueños de la moral pública del país, creyeron ser los propietarios de la lucha contra la desigualdad y resulta que tenemos la peor de las desigualdades que es tener una educación pública que no es un instrumento de justicia.
Creyeron tener equipo y son un verdadero cambalache. Porque el barco del país es un barco que navega sin capitán, con una tripulación que tiene varias órdenes sin ningún sentido de lo que hay que hacer.
