Ambos deberán pagar una multa al MVOTMA tras constatarse que cazaron para consumo propio.
Los dos hombres, de 27 y 28 años, habían sido detenidos el lunes tras el allanamiento de su vivienda en la localidad de José Pedro Varela, donde se incautaron armas, lanzas y lancetas, además de carne, embutidos y huesos de especies nativas, que evidenciaban la práctica de caza.
La inspección por parte de Policía y técnicos de la Dirección Nacional de Medio Ambiente se llevó a cabo a raíz de más de 30 denuncias recibidas por la Dinama durante el pasado fin de semana, luego de que los mismos cazadores divulgaran fotos en las redes sociales en las que se los ve matando carpinchos y mulitas.
En nuestro país, la caza es una infracción administrativa plausible de sanciones económicas, pero no configura un delito en sí misma. Sí existe delito de caza furtiva asociada a la propiedad privada y de penetración ilegítima de predio ajeno, pero ninguna de estas figuras pudo constatarse en este caso, como tampoco la comercialización de los animales, según informaron a Telemundo fuentes judiciales. Por ese motivo, en la noche de este martes, la jueza determinó el cese del emplazamiento de los detenidos, aunque la investigación continúa.
Paralelamente, ante la repetición de estos episodios y la creciente sensibilidad que generan en la población, la Dinama llamó a la sociedad a una instancia de discusión profunda sobre la caza en Uruguay, que se llevará a cabo a fin de mes.
Algunas especies que son plaga nacional, como el jabalí, la cotorra y el garibaldino, conocido vulgarmente como pájaro negro del arroz, pueden cazarse libremente en Uruguay, es decir, durante todo el año y sin límite de ejemplares. Lo mismo sucede con las serpientes venenosas y especies urbanas como las palomas, los gorriones y las ratas. No obstante, existen restricciones de carácter general que se aplican a todos los tipos de caza.
