La comuna canaria promueve cambios en la normativa para dar una respuesta a este problema. El director de Tránsito dijo que el 90 % de los vehículos decomisados, nunca son retirados por sus dueños.
La Intendencia de Canelones coordina su trabajo con la Jefatura y la Policía de Tránsito. A veces intentan disuadir y otras veces van directamente a aplicar sanciones. Cuando se van acercando fiscalizan a todos los vehículos, tanto los de quienes participan en la picada como los que están mirando. La Intendencia analiza con Unasev cambios en la normativa que esté más claro cómo actuar.
La mayoría de los vehículos son motos. De cada diez que se decomisan, 9 nunca son retirados por los dueños. La nueva Ley de Tránsito que enviará el Poder Ejecutivo al Parlamento prevé que si es necesario se puedan destruir. Los puntos más identificados donde se realizan picadas son en la cabecera del puente de Santa Lucía y el ingreso a Pando por Ruta 8.
La Intendencia afirma que en Barra de Carrasco y Rambla de Ciudad de la Costa, donde algunos vecinos denuncian que se realizan picadas, la realidad es más compleja. Allí el formato es otro: se reúnen y miran los autos en una actividad que se parece más al tunning. Lavan los autos en una estación de servicio y toman refrescos.
Es cierto que cuando llegan o cuando se van aceleran y hacen ruido, pero no son picadas. La Intendencia les pide a los vecinos que informen, que llamen al 911 y hagan la denuncia. De esa forma van generando un mapa que permite que la respuesta sea más rápida.
