La vida de a familia cambió radicalmente desde el accidente, el tratamiento tiene un costo muy alto y reclaman que les ayuden a solventarlo.
En mayo de 2017 Antonelha Tamara estaba en segundo de liceo. Durante un experimento en la clase de Ciencias Físicas en el Liceo nº2 de Artigas sufrió quemaduras en su cuerpo de segundo y tercer grado. Fue trasladada al Hospital de Artigas y luego un avión de la Fuerza Aérea la trasladó a Cuidados Intensivos del Pereira Rossell. Estuvo internada 35 días y le realizaron seis cirugías.
Su familia se debió separar. Por el tratamiento la joven tuvo que comenzar a vivir en Montevideo junto a su madre. Su padre debió permanecer en Artigas y aumentar sus ingresos para poder enfrentar los gastos: además del kiosco, se convirtió en remisero y los domingos vende pollos al spiedo.
La familia realiza almuerzos solidarios en Artigas para recaudar dinero para el tratamiento que requieren las cicatrices grandes en sus piernas y el abdomen.
Reclaman que el Estado ayude para solventar el tratamiento.
Luego de lo ocurrido la Fiscalía determinó que se había tratado de un accidente por lo que no existían responsabilidades penales. Sin embargo, una reciente investigación de la ANEP determinó que existieron responsabilidades de Secundaria. Basado en eso, la familia inició una demanda civil a Secundaria. Reclaman una indemnización por los daños y perjuicios causados.
