Ahora la pequeña debe someterse a cirugías para cerrar su paladar, reconstruir su nariz y boca y lograr caminar.
El 15 de enero Claudia llegó junto a su hija Catalina y una mochila cargada de expectativas y sueños. Lograr una mejor calidad de vida para su pequeña la llevó a investigar, a mover cielo y tierra y a no aceptar los cientos de “no se puede” que le dieron en nuestro país.
De este modo, llegaron a España, a San Juan de Dios, un centro de referencia a nivel mundial, donde le han realizado distintas intervenciones.
En tan solo dos meses Catalina fue operada tres veces, una primera intervención fue a nivel facial, una segunda para mejorar su alimentación con el botón gástrico y en una tercera instancia una cirugía de ano y estómago.
Todo este largo proceso le ha permitido a Catalina tener una gran mejoría en su calidad de vida, en su alimentación, en su descanso y en su estado de ánimo. Lo que permite además una mejor calidad de vida para su mamá quien está 24 horas junto a ella.
Esta primera etapa tuvo un costo de unos 75.000 euros, que la familia de Catalina logró costear con sus ahorros y las distintas campañas que se hicieron en nuestro país.
Pero ahora hay que enfrentar la segunda etapa y para esto necesitan unos 50.000 euros más. Las nuevas cirugías que Catalina tiene por delante le van a permitir cerrar su paladar, reconstruir nariz y boca y poder caminar.
Por esto es que Claudia su mamá solicita nuevamente la solidaridad de todos los uruguayos, para poder terminar de cumplir el sueño que la llevó a emprender este viaje que además la tiene lejos de sus otras dos hijas.
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