El director interino de arbolado de la Intendencia de Montevideo señaló que los árboles con mayor riesgo son unos 2.500.
En el programa Desayunos Informales, Alfonso Arcos explicó que se recibieron unas 600 llamas de vecinos por la caída de unos 300 árboles.
Una hora después de que finalizó el temporal, las brigadas salieron a levantar los árboles caídos en las calles con el objetivo de que se pueda transitar.
Actualmente queda material verde que no ha sido levantado.
“Lo que pudimos constatar es que la mayoría de los árboles estaban sanos, no tenían grandes defectos ni problemas en su estado vegetativo. Se cayeron y se quebraron ramas por la fuerza del viento. Las estructuras de los árboles empiezan a fallar. En una ciudad que tiene 211.000 árboles, esta no es una cantidad que ponga en riesgo la estructura de arbolado”.
