Afirma que aumentaron los operativos y la presencia policial en las calles.
El informe sostiene que “en un escenario de rigidez presupuestal con el 78% de los gastos en remuneraciones y solamente el 22% de los recursos destinados a funcionamiento e inversiones, se comenzó con un proceso de toma de decisiones en los aspectos de la racionalización del gasto, lo que determinó dejar sin efecto gastos e inversiones no relevantes o inoportunos, iniciados por la anterior Administración”.
“Se estableció un nuevo despliegue territorial de la policía descentralizando el PADO, incrementando el patrullaje y los controles en la vía pública”, indica el informe.
“La aplicación de los cambios desarrollados en la Ley de Urgente Consideración, habilitaron mejores instrumentos y herramientas para el accionar policial” afirma el documento.
Además indica que “la creación de Brigadas Antidrogas en Montevideo y Canelones permitió realizar más allanamientos, más cierres de bocas de droga, incautación de sustancias y aumento de la cantidad de personas privadas de libertad”.
De marzo a diciembre se desarticularon 794 bocas de ventas de drogas, de las cuales 154 corresponden a allanamientos realizados por la dirección de investigaciones de la policía.
Se destaca también “la recuperación de las comisarías como unidades operativas básicas de la policía” y se afirma que hubo una baja delitos marzo a diciembre: 21% homicidios, 11% rapiñas, 19% hurtos, 4,5% violencia doméstica y 1% abigeatos.
El Ministerio del Interior destaca también la compra de 600 cámaras corporales y 8.000 chalecos antibalas, además de 179 camionetas y automóviles y 43 motocicletas.
Se incluye además en detalle la droga incautada, las requisas en las cárceles y sus resultados, algunas operaciones que fueron de impacto público, y un balance de actuaciones de cada jefatura del país.
