“Estamos bastante preocupados”, afirmó el presidente de la SCJ.
En este sentido, el presidente de la SCJ, Ricardo Pérez Manrique, afirmó:
“Estamos bastante preocupados. Las razones han sido de índole presupuestales, lo que ha generado un ahorro que en el futuro podrá volcarse a otras circunstancias, pero también responden un poco a un cambio en la situación social, a un cambio en la forma de comunicación. Estos jueces de paz tenían una función muy importante en materia de registro civil; hacían casamientos, anotaban defunciones, etc. Hoy las personas nacen o mueren en los sanatorios de las capitales, entonces ha habido como un proceso en el cual, lamentablemente, en un momento hubo que hacer una especie de balance sobre la relación entre costo-beneficio, entre lo que se invertía y la cantidad de gente que se atendía. Hoy quiero decir que la Corte está muy preocupada por la labor social que cumplían estos magistrados y que probablemente en no poco tiempo se pueda encontrar alguna alternativa”.
