Las viandas escolares: un tema con el que muchos padres deben lidiar todo el año

Según los expertos, las famosas luncheras o conservadoras generan gran estrés por causas que son múltiples, pero también evitables.

Expertos en nutrición infantil afirman que el agobio que sienten muchos padres con respecto a las viandas escolares es multicausal y va más allá del intento por enviarle a sus hijos una comida equilibrada y nutritiva.

La falta de tiempo, el cansancio y la economía del hogar son factores que inciden en este fenómeno, especialmente la falta de tiempo para cocinar y mucho menos para pensar en un menú apetitoso y balanceado, que pueda calentarse o que conserve el frío y que no largue olores desagradables al abrirlo.

Muchos padres optan por productos ultraprocesados que los sacan del apuro, pese a que no son sanos y no contribuyen a conservar la vitalidad y óptimo rendimiento intelectual. La alimentación debería ser simple y variada, con platos sencillos que resulten de fácil digestión y que el niño ya conozca.

Por último, el pack, lunchera o vianda debe ser lavable, por lo cual los especialistas prefieren los de plástico y desaconsejan los de tela.

 


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