La esposa del candidato nacionalista Luis Lacalle Pou habló con Telemundo.
"En esa última etapa, ya es la séptima vuelta por todo el país, estamos muy contentos de poder seguir acompañando, seguir estando mano a mano con la gente, conversar, que nos sigan trayendo las dificultades que tienen. Las recorridas que hicimos desde febrero hasta ahora fue de pueblos chicos, capitales y ciudades medianas y ahora seguimos cerrando por capitales. Lo que trato de hacer cada vez que venimos es seguir conociendo gente y entender qué está pasando en el resto del país como para poder sacar denominadores comunes. A veces nos acercan problemáticas específicas de las cuales tratamos de hacer el nexo. Mi idea es poder ser una visagra entre lo que está pasando y ver quién nos puede dar una mano para encontrar una solución", dijo Lorena Ponce de León, esposa del candidato nacionalista.
Sobre cómo vio a su esposo en el debate, respondió:
Muy objetiva no voy a poder ser. Luis tiene una calma especial. Siempre cuando va a este tipo de enfrentamientos o disertaciones él se prepara mucho. Venía estudiando hace tres días. Todos estábamos un poquito nerviosos, porque son instancias que tienen mucha responsabilidad porque él no solo se representa a él sino a todo el partido sino también a los otros partidos de la coalición que hoy nos están apoyando. Hacer un buen papel siempre te carga de nervios.
Sobre los resultados de las elecciones, Ponce de León señaló: "A mí no me gusta poner la carreta adelante de los bueyes, primero vamos a ver qué pasa, vamos a trabajar para el 24, que va a ser muy especial. Tenemos que estar tranquilos porque por el momento nadie ganó nada. Estamos haciendo las cosas bien, sin inventar, sin mentir, diciendo la verdad, mirando a la gente a la cara".
También se refirió a la agenda de su familia: "La dinámica de los últimos meses la verdad que cambió mucho. Los chiquilines nuestros por suerte son adolescentes y nos pueden acompañar más, también han militado muchísimo, los han visto repartiendo listas y bajando carteles. Es muy lindo que la familia participe. Ellos saben que esto tiene un tiempo finito y después vamos a poder estar un poco más en familia de vuelta. Si Dios quiere después vamos a empezar cinco años de vértigo".
