Si bien los dos líderes políticos dejan sus cargos, no dejarán la actividad.
La sesión del Senado será histórica.
Dos expresidentes, líderes y adversarios políticos, dejarán sus bancas en la cámara alta el mismo día.
El expresidente Sanguinetti llegó a la cámara como primer senador de Batllistas, sector político que lidera y que lo impulsó como candidato presidencial en las últimas elecciones nacionales.
El expresidente Mujica llegó también a la cámara como número uno en la lista de candidatos que presentó su sector, el Movimiento de Participación Popular.
Ambos asumieron el 15 de febrero de este año; ambos renunciarán este martes 20 de octubre.
La salida conjunta pareció consensuada; durante las últimas semanas se los vio hablar mucho en las pausas de las sesiones.
Tienen casi la misma edad, y llegaron por caminos distintos a los máximos cargos de la política nacional.
Sanguinetti fue diputado durante la década del sesenta; fue ministro de Industria y Comercio, y fue ministro de Educación; presidente entre 1985 y 1990 y entre 1995 y 2000; y electo senador en 2004 y 2019.
Mujica fue secretario de Enrique Erro; en la década del sesenta pasó a la clandestinidad como integrante del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros. Tras la vuelta a la democracia, fue electo diputado en 1994 y senador en 2004; durante el primer gobierno del Frente Amplio fue ministro, y en 2009 electo presidente.
Con las últimas elecciones nacionales ambos volvieron al Parlamento, hasta éste martes.
Sanguinetti continuará como secretario general del Partido Colorado; la titularidad de la banca la ocupará el exintendente de Rivera, Tabaré Viera.
Mujica había dicho tiempo atrás que “el árbol viejo no tiene que hacer tanta sombra”, y que era tiempo de renovar. No abandonará la política, continuará hasta el último día. Su lugar en la cámara lo ocupará el diputado Alejandro Sánchez.