El próximo lunes 1º de junio, 80 mil niños de las escuelas públicas comenzarán sus clases. Sin embargo, desde la Federación Uruguaya de Magisterio se asegura que no están dadas las condiciones para hacer frente a la emergencia sanitaria."No se va a poder realizar de la mejor manera, que es lo que todos queremos, porque […]
El próximo lunes 1º de junio, 80 mil niños de las escuelas públicas comenzarán sus clases. Sin embargo, desde la Federación Uruguaya de Magisterio se asegura que no están dadas las condiciones para hacer frente a la emergencia sanitaria.
"No se va a poder realizar de la mejor manera, que es lo que todos queremos, porque no hay auxiliares de servicios suficientes en todas las escuelas, porque no hay transporte fluido a nivel interdepartamental que permita el traslado de docentes, funcionarios y niños, no hay materiales para que se realice la limpieza necesario. Y una partida por única vez de dinero que van a recibir las escuelas por única vez de $2.000 es sumamente insuficiente en el marco de la exigencia de un aseo necesario para poder prevenir la propagación de la enfermedad", expresó Elbia Pereira.
Los maestros no buscan posponer el reinicio de las clases pero consideran que puede ocurrir lo mismo que sucedió en el comienzo de las escuelas rurales.
"En estas circunstancias va a ser algo similar si esto no se contempla", agregó Pereira.
La Federación respondió a la afirmación del presidente del Codicen de realizar una prueba evaluatoria para medir la formación de los estudiantes tras la cuarentena.
"La dimensión evaluación diagnóstica forma parte de todo trabajo profesional docente. Nadie puede pensar que un maestro va a planfiicar acciones si no tiene la realidad de cómo están los niños en términos de aprendizaje. Es algo que compartimos totalmente", dijo Pereira.
La Federación de Magisterio afirma que los maestros están dispuestos a trabajar presencialmente porque lo consideran fundamental y porque a pesar de la pandemia nunca dejaron de ejercer ya que lo hicieron de manera virtual.
