Las exportaciones aumentaron, pero bajaron el valor, por lo que la facturación se mantuvo estable.
En este sentido, se apuntó:
“En realidad, el precio bajó. Nosotros al cierre de 2016 vamos a estar en promedio de todos los mercados en más o menos un 10 % menos de precio respecto del año 2015. Compensa el aumento de volumen exportado y los ingresos totales por venta de carne vacuna se van a mantener más o menos estables entre los dos años. Los precios estuvieron durante cinco años, de 2011 a 2015, oscilando entre 3.900 y 4.000 dólares, en una forma interesante, sin grandes variaciones, con cambios internos. En esos años, China pasó a ser el principal mercado y Rusia dejó de serlo. Las cosas no duran para siempre. Por distintas situaciones de mercado, han hecho que los principales mercados, ya desde fines de 2015 y acentuándose en el primero de 2016, hubo una baja generalizada de precios en todos los mercados”.