Por año se realizan aproximadamente 200 prótesis de ojos, nariz, boca, paladar, dientes y orejas.
La Fundación Rostros es una organización sin fines de lucro que depende de la Facultad de Odontología de la Universidad de la República (UdelaR) y se dedica a fabricar prótesis bucomaxilofaciales.
Por año se realizan aproximadamente 200 prótesis a personas que tienen problemas congénitos, oncológicos o que sufrieron pérdidas de algún miembro de la cara, como ojos, nariz, boca, paladar, dientes y orejas.
Las más comunes son las oculares, y luego la "combinación de nariz y boca".
En los últimos años han aumentado las prótesis nasales. "De hace unos cinco años para acá, la mayoría de los casos de prótesis nasal que nos llegan son por el consumo de cocaína. Antes era muy raro ver, eran más por un tema del cáncer, y ahora últimamente todos los que vienen son por el consumo de cocaína", explicó a Telemundo el doctor Marcelo Bernardez, parte del equipo técnico de la institución.
Graciela Ramírez, una mujer de 64 años que vive en El Pinar, tiene una prótesis ocular hace cuatro años y contó a Telemundo como le "cambió todo".
"Tuve un accidente cuando en la escuela, a los 11 años, me pegaron en el ojo y no tuve la asistencia que tenía que tener en ese momento. Tenía retina desprendida y agujero de mácula y pasé un proceso muy feo porque tuve glaucoma, todo, hasta que decidieron que me tenían que operar. Me recomendaron este centro y la verdad que fue un éxito. Me hice la primera prótesis y esta ya es la segunda", narró.
Ramírez contó que fue "muy fuerte" el cambio. "Me da mucha confianza, autoestima, y la verdad que le agradezco a todo el equipo. Es increíble lo que ha cambiado. Lo recomiendo con los ojos cerrados", expresó.
Melanie Villarejo tiene 21 años y al año y medio le diagnosticaron un tumor maligno llamado retinoblastoma. "Estaba muy avanzado y me tuvieron que quitar el ojito. Desde entonces uso prótesis. Mi experiencia acá es muy buena, siempre me tratan bien. Vengo desde hace años, me siento en casa cada vez que vengo. Lo que más me gusta es que además me hacen parte del proceso", valoró.
Además, consideró que son "tan profesionales y detallistas que generalmente la gente no se da cuenta" del uso de la prótesis. "Hay gente que capaz que me va a ver ahora y se va a enterar ahora que tengo una prótesis, pero sí, tengo una prótesis", señaló.
"Desde chica me costaba la escuela. Siempre alguien te observaba porque tienen que buscarte algo diferente. Pero va avanzando tanto la tecnología que hoy en día la gente no se da cuenta. Me cambió la autoestima, me siento muy segura. Y eso es en gran parte por ellos", agradeció.
Bernardez dijo que es "una satisfacción fabulosa" ver a un paciente con su nueva prótesis. "Desde el primer día y nos sigue pasando. El paciente viene con una expectativa muy grande siempre y cuando ves que pusiste todo tu esfuerzo y que lograste algo que el paciente se ve y se emociona, bueno... es lo mejor que nos puede pasar", celebró.
"Yo soy odontólogo, ejerzo la odontología también en particular. Un diente me puede quedar lindo, pero la satisfacción que me da el poder de devolverle algo de la vida al paciente, que se puede integrar socialmente a través de una prótesis de ojo, de nariz, no se cambia", cerró.
