Tenía 35 años. Formó parte de la primera camada de Negociadores Tácticos Policiales que se graduaron en 2018 y que fueron certificados por la Policía Nacional de Francia.
“Sencillo, bonachón, respetuoso y bien dispuesto siempre”. Así describen sus compañeros a Eduardo Joel Rodríguez, el agente de la Guardia Republicana que murió este sábado tras ser baleado en la cabeza el viernes durante un robo.
Tenía 35 años. Formó parte de la primera camada de Negociadores Tácticos Policiales que se graduaron en 2018 y que fueron certificados por la Policía Nacional de Francia.
Dentro del grupo de negociadores, asistió muchas veces a familiares de quienes estaban en situaciones complejas.
Amaba la velocidad y las motos. Justamente, la moto que le robaron y le costó la vida, era una Kawasaki de alta cilindrada.
“Sus valores de humanidad, compañerismo, honestidad y profesionalidad permeaban en cada una de sus acciones, siendo su sello la entrega total y dedicación a una especialidad, la Negociación Táctica Policial, que en sus primeros tiempos no era comprendida en su real dimensión por la interna Policial”, agregaron sus compañeros.
“Padre, hijo, hermano, policía premiado por su arrojo y valentía, nos vas a hacer mucha falta”; “ha dejado la vara muy alta en esta fuerza”, escribieron otros efectivos de la Guardia Republicana.
Joel murió este sábado tras recibir un disparo en la cabeza en una rapiña ocurrida el viernes en la zona de Molino Pérez en Punta Gorda.
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