El ministro fue convocado por el senador colorado Pedro Bordaberry, quien acusó al gobierno de actuar condicionado por la interna del Frente Amplio.
El canciller ratificó que el gobierno continuará buscando una fórmula de entendimiento a través de una salida negociada entre oposición y el régimen de Nicolás Maduro, y rechazó que el gobierno uruguayo haya pedido retirar la liberación de los presos políticos como condición para favorecer el diálogo.
“Lo que dijimos fue que había que sacar las condiciones porque las condiciones eran un obstáculo para que se sentaran las partes", dijo Nin Novoa.
El canciller explicó que para el gobierno uruguayo sería “irresponsable” reconocer al presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, como presidente encargado de Venezuela.
“Guaidó no tiene control sobre el territorio. No tiene control efectivo de la administración, ni de los ministerios, ni de la Policía, ni de las Fuerzas Armadas. Y tampoco puede garantizar el cumplimiento de las obligaciones contraídas por el Estado venezolano. El gobierno de Guaidó en las condiciones actuales solamente puede validarse por la vía de la fuerza o por un levantamiento militar, o una revuelta popular, o una intervención extranjera", sentenció el canciller.
Nin Novoa fue convocado por el senador colorado Pedro Bordaberry, quien acusó al gobierno de actuar condicionado por la interna del Frente Amplio. Señaló que primero se plegó al “mecanismo de Montevideo”, que promovía el diálogo sin condiciones, y después firmó la declaración del “grupo de contacto internacional”, que apoya elecciones libres en el menor tiempo posible.
“Lo que pasa es que en esa personalidad disociativa hay que conformar a la barra interna del Frente Amplio y al rato tenemos que hablar en serio hacia afuera y cumplir con nuestra conciencia", sentenció el senador Bordaberry.
