La Fiscalía investiga el caso. El ministro del Interior convocó al jefe de Policía local por el tema.
El Ministerio del Interior dispuso una “investigación de urgencia” y un sumario administrativo a un funcionario policial que disparó en Durazno a Lucas Pedrozo, un joven de 24 años con un trastorno mental y cuyas circunstancias de muerte están siendo indagadas. La familia denuncia que fue la propia Policía quien mató al joven.
Todo sucedió en la noche del pasado 12 de mayo en una casa de Durazno. Lucas estaba “alterado”, había discutido con su madre y le pegó una cachetada a una de sus hermanas. Ante esto, su familia hizo lo que ya había hecho otras veces: llamar a la Policía para que lo trasladaran a un centro de salud y poder internarlo. Sin embargo, esa situación terminó con Lucas muerto.
“Eran como las once y media de la noche. Lucas era un paciente de salud mental. Unos días antes habíamos ido a hacer una denuncia porque Lucas estaba molestando a los vecinos, y queríamos que vinieran como había venido otras veces la Policía: lo convencían, nosotros lo ayudábamos a vestirlo y lo llevaban al hospital, y quedaba unos días internada, lo que la médica estipulara según cómo estuviese. Fuimos a hacer la denuncia. Esperé al lunes, a que me llamaran por teléfono para avisarme que venían a buscarlo; yo estaba trabajando, pero salía un rato y los ayudaba. Pero no pasó eso”, contó la madre del joven en entrevista con Durazno TV.
Esa noche, luego de que su familia le dijera que bajara del techo y que dejase de “molestar a los vecinos”, Lucas entró a su casa, discutió con su hermana y le pegó una cachetada. Ante esto, ella llamó a la Policía, algo que suelen hacer ya desde hace “cuatro-cinco años”, cada vez que se da una situación similar. “Le dije que se dejara de joder, que estaba molestando a los vecinos y que estaba solo con mamá. Se enojó y me dio una cachetada. Como vi que estaba alterado, llamé a la Policía, porque siempre se llama a la Policía, ellos vienen, están horas con él”, contó la joven.
La Policía llegó y, según el relato de otro familiar, desde el primer momento hubo un funcionario que cargó su arma con munición menos que letal, amenazó a Lucas y le exigió que se tirara al piso. La familia asegura que el joven no estaba armado y que en la mano llevaba un cepillo de dientes.
Lo que vino después es parte de lo que ahora se está investigando. “Le tiró como tres-cuatro tiros a la carrera. En total fueron como ocho tiros”, dijo un familiar del joven, y agregó: “Le dieron con balas de goma, pero adentro lo mataron, le dieron un culatazo o algo, le rompieron hasta las costillas. Y cuando ya estaba esposado, lo pusieron de pie y le dieron dos tiros”.
“Los policías dicen que el gurí estaba armado, que fue en defensa propia y que estaba todo oscuro. Pero no estaba armado y estaban todas las luces prendidas”, agregó el mismo familiar. La madre de Lucas, en tanto, agregó que no había cuchillos porque ella, por precaución, los tiene “bajo llave y con candado” en una caja.
Otra hermana de Lucas, que es enfermera, llegó cuando ya se estaban llevando a su hermano: “Cuando yo llegué, cuatro policías lo estaban sacando boca abajo. Nadie hizo presión en las heridas, nadie dijo danos una frazada o algo que se nos muere desangrado. Yo me hubiese ido con él en el patrullero haciendo presión para salvarle la vida. Nosotros queríamos que lo internaran y que no molestara a nadie, pero no queríamos que terminara de esta manera”.
Cuando llegó al centro de salud, Lucas ya estaba muerto, según la información que tiene la familia. “Me pidieron permiso para entrar, pero nunca me imaginé que me iban a matar al gurí. Lo sacaron boca abajo, esposado, y lleno de sangre”, agregó la madre de Lucas.
Ahora, según pudo saber Telemundo, en las últimas horas hubo una reunión del jefe de Policía de Durazno con la fiscal que tomó el caso.
“Institucionalmente en forma inmediata a los hechos se realizó una investigación de urgencia que derivó en la instrucción de un sumario administrativo al funcionario que realizó los disparos”, según la información policial a la que pudo acceder Telemundo.
En la carpeta investigativa figuraron entre otras cosas el informe de Policía Científica y el registro audiovisual de las cámaras corporales de los efectivos. “El arma utilizada y los cuatro cartuchos de munición menos que letal fueron derivados para pericia técnica a la Dirección Nacional de Policía Científica”, agrega la información.
Al momento, la Fiscalía aguarda por el informe forense de la autopsia al joven. En tanto, el ministro del Interior, Carlos Negro, convocó al jefe de Policía de Durazno para “seguir de cerca” el caso. Las autoridades también se pusieron a disposición de la familia.